En estos días estoy realizando unos dibujos sobre el amor, averiguando sobre el amor, cuestionando el amor, cuestionandome sobre el amor, preguntándome ¿que es el amor?, un sentimiento, una sensación, un...no se que, que no podemos explicar, por eso fui a los orígenes, a la mitología y ahí me encontré cara a cara con Eros - Cupido el Dios del Amor (su nombre varía si lo tomamos como un Dios Griego o un Dios Romano), para la mitología Eros es un Dios que juega con el destino de los humanos, nos hace enamorar locamente, profundamente de otro ser, pero debemos saber que tenemos un cincuenta por ciento que las posibilidades esten a nuestro favor, que ese otro ser, se enamore también de nosotros, ya que Eros ,es quien decide cuando nos lanza una flecha, si la flecha es de oro con plumas de palomas nos llena de amor, pero si nos lanza una flecha de plomo con plumas de búho despierta nuestra indiferencia hacia el amor.
Si Eros es quien decide sobre el amor, ¿porque nos empeñamos en amar?, y no lo dejamos a su entera decisión, a su entera arbitrariedad, acaso no es arbitraria la decisión de Eros, el elegir una flecha u otra, Él mismo cayó en sus propias redes, como dice el drama mítico, cuando se enamora de Psykhe y después de perderla, le pide permiso a Zeus para casarse con Ella.
Así que salí a buscar el amor, preguntándome que le pasa a los mortales, algunos creyeron que con sólo su nombre sería una garantía para el amor incondicional de otros, otros que con su belleza alcanza, otros que son su bondad era suficiente, pero en mi búsqueda me encontré con algunas historias, las mitológicas, las reales, las ficcionales, de todas ellas intentó rescatar el amor, en estos tiempos del 2.0, donde lo virtual domina lo real, o tal vez, el amor este cambiando y algunos nos resistimos a las flechas virtuales y al amor virtual, porque todavía queremos ser tocados, acariciados, amados, sentir el roce de la piel del otro, cuando nuestros labios se unen y nos volvemos uno en pasión y locura.
La literatura no fue ajena al amor, quien de nosotros no leyó o recito alguno de las estrofas de Romeo y Julieta de Shakespeare, o cuando el Quijote habla sobre su amada Dulcinea, escritas por la pluma de Calderón de la Barca, y ahí me digo: ¡que paradoja!, en esos tiempos ellos escribían sobre el amor con una pluma, ¿Cual sería la pluma con la que Shakespeare o Calderón escribieron sus dramas literarios?; al leer esos versos, el amor nos invade, nos llena, nos cubre, nos penetra y entonces me vuelvo a preguntar ¿si un amor así, podrá tocarnos a nosotros alguna vez?.
Los dramas míticos son muchos y muy variados, ya mencione el de Eros y Psykhe, el otro es el de Helena y Paris, Helena es raptada por Paris, algunos creen que Ella estaba enamorada de su raptor, este rapto de amor origina la guerra de Troya, eso si son amores!!!!; el de Ulises y Penélope, por el día Ella tejía, por la noche destejía mientras esperaba el regreso de Ulises y Él de aventura en aventura, ¿será que el amor es eso?, esperar y esperar, para sólo vivir un instante, un encuentro, un momento, el famoso toco y me voy, del que todos hablan en la actualidad, pero al que todos se aferran con uñas y dientes, cuando el amor les perforó el corazón.
En mi busqueda del amor me pregunté que le pasó a los grandes personajes de la literatura, la plástica, la música, me encontré con grandes historias de amor, algunos de ellos escribieron cartas de amor, que fueron publicadas en libros y hoy se las puede encontrar en internet, ahí estaban las cartas de amor de Victor Hugo a una de sus amantes Léonie d´Aunet, mientras otra de sus amantes le escribía cartas a Él, las de Enrique VIII a Ana Bolena, cuando la amaba, un amor que duró ocho años, hasta que la encerró y luego la decapitó, esos son amores que matan!!!!, el amor de Napoleón por Josefina y cuando Ella no le respondía, se volcó a los brazos de María Walewska, a quien le dijo: “No he visto más que a usted, no he admirado más que a usted, no deseo más que a usted”. Las de Lord Byron a Caroline Lamb, las cartas de Oscar Wilde a Alfred Douglas y Freud que todo lo analizaba le escribió novecientas cartas de amor a Martha Bernays, a la que sólo vio seis veces en cuatro años; el autor del Principito, Antoine Saint-Exupéry, le escribió una carta de amor a una joven de veintitrés años, casada y embarazada de dos meses, después de esa carta ya no se supo más de Él. Las cartas de Gabriela Mistral al poeta Manuel Magallanes Moure, donde desnuda su amor apasionado hacia Él, Pablo Neruda a Matilde Urrutia en una carta le dice: “No eran celos, amor, sino exigencia de tu plenitud, de tu totalidad. Ahora ya te he arado entera, te he sembrado entera, te he abierto y cerrado, ahora eres mía. ¡Para siempre!” y algunos se escandalizan por lo que hoy se escribe en lo público y en lo privado, otro es el tono de las cartas que le escribiera María Guadalupe de la Cuenca a su esposo Mariano Moreno, lo trágico es que Él nunca las leyó, ya que murió en altamar, así podría seguir citando cartas de amor, pero quizás la que todos más recuerden, fue dicha en la película Sex and The City, donde Mrs Big le dice a Carrie en la escena cuando terminan de casarse “siempre tuyo, siempre mía, siempre nuestros”, es el final de la carta de amor que Beethoven le escribió a su amada esposa, se la considera una de las mejores cartas de amor escritas.
El cine no fue ajeno al amor y sus historias, no me alcanzaría el tiempo, ni el espacio para escribir, sólo voy a mencionar dos películas “Algo para recordar”, con Deborah Kerr y Cary Grant, un amor que comienza en un viaje de regreso a New York, Ellos se hacen una promesa de amor en el tiempo, el destino le juega a Ella una mala pasada pero al final el amor los vuelve a unir, la otra película sus protagonistas son Robert y Francesca se aman durante cuatro días, son los únicos días que ellos pasan juntos, donde los personajes sienten que son el uno para el otro, pero no se animan a cambiar sus vidas, viven un romance secreto, inmenso, maravilloso, la película es “Los puentes de Madison” con Meryl Streep y Clint Eastwood, debo decir que son las únicas películas de amor que me gusta ver y con las cuales lloro, y no importa cuantas veces las vea, pero el amor tiene eso que nos emociona en la ficción, cuantas novelas habremos leído, cuando novelas vimos por televisión, acaso no imaginamos ser los protagonistas de esas historias de amor, será porque el amor no, nos llegó, con tanta pasión, que morimos ante la indiferencia de ese amor no correspondido y queremos ser los protagonistas de esas historias ajenas.
En las artes plásticas el amor no pasó de largo, todos hicieron obra sobre el amor, todos siguen realizando obra con el amor y todos seguiremos creando obra con el amor, pero cuantos de esos artista no vivieron grandes historias de amor, una versión dice que Leonardo Da Vinci cuando pintó La Gioconda, además de ser un encargo, el estaba enamorado de Ella, así como ahora se descubrió una versión de La Gioconda en el Museo del Prado, se dice que Leonardo pintó tres versiones de La Gioconda, una de ellas estuvo con Él hasta el día de su muerte, cuando lo encontraron muerto el estaba abrazado al retrato de La Gioconda, ya que era su gran amor, de todas las versiones esta es la que más me gusta, Pablo Picasso y sus amores a los cuales homenajeo realizando retratos de cada una de ellas, el gran amor entre Dalí y Gala, Georgia O’Keeffe y Alfred Stieglitz, no quedaron ajenos al amor, se escribieron cartas de amor entre 1915 y 1946 en total son unas 25.000 hojas, una parte de ellas se encuentran reunidas en un primer volúmen del libro “My one faraway”; el amor tan especial entre Robert Mapplethorpe y Patty Smith.
La música no quedo ajena, un ejemplo es la ópera Madame Butterfly de Puccini, Ella se casa con Pinkerton creyendo que es para toda la vida, pero Él sólo quería un instante, la abandona, con los años Pinkerton se entera que Madame Butterfly tuvo un hijo de Él, decide regresar con esposa estadounidense para llevarse al hijo y criarlo, Madame Butterfly accede darle a su hijo y luego se se quita la vida por el desamor de Él, todos los días una nueva canción de amor encuentra sus acordes, para que todos vayamos cantando su letras por la vida y cada canción nos llega en un momento de nuestras vidas, en un tiempo de nuestras vidas, esa canción que ayer nos emocionaba, hoy la dejamos guardada para darle lugar a otra y así la música sigue marcando el ritmo del amor.
¿Quien nos dice que es el amor?, ¿quien nos dice como es el amor?, acaso el amor no nos vuelve locos, nos hace perder el sueño, y vuelvo a preguntarme si el amor, es la decisión de Eros, ¿porque seguimos luchando por el amor?, una lucha constante a la que los seres humanos nos enfrentamos cada día de nuestra vida, esa búsqueda que nos lleva a buscarlo detrás de cada puerta, cuando doblamos en cada esquina, pero ahora nos enfrentamos al amor virtual del que hablaba al principio, cuando muchos empiezan relaciones a través de un chat, con alguien que no conocen, alguien a quien no le ven la cara, con alguien que conocen, pero sólo comunican a través del chat, cual es la diferencia de alguien que podíamos conocer en un bar o en la calle, ¿ver el rostro de ese posible amor?, ahora es.....es desde nuestras casas, desde nuestro trabajo, desde...quien sabe donde estan cada uno de los que se conectan buscando el amor, pasamos del contacto físico, al contacto virtual, del amor epistolar, al amor teléfonico, al amor virtual, al correo electrónico, al mensaje de chat y cuando llegamos al amor entre dos, solo dura un instante, es tan efímero como el tiempo que a mí ,me lleva escribir sobre el amor.
Pero hoy muchos hablan de las cosas bellas que se escriben unos y otros a través del chat, comos esas pequeñas cartas de amor antes mencionadas, cuantas palabras de amor se dicen y cuando uno les pregunta ¿ya lo conociste?, ¿ya se encontraron? la respuesta es -no-, porque con suerte vive dentro de los límites del país, a veces en otro país y si viven cerca llevan tanto tiempo escribiendo palabras de amor, que nunca llegaron al encuentro del amor, ¿el amor puede ser virtual?, será este el nuevo amor, un amor en donde todos se juran amor eterno, pero cada uno lo hace desde su lugar, pero si todos seguimos buscando el amor ¿porque no nos encontramos en el amor real?, si tanto ansiamos ese amor, el alma gemela del que todos hablan y según la mitología dice que Zeus tenía miedo que los humanos quisieran ser dioses, tomó una espada y nos dividió a la mitad, así vamos por el mundo buscando nuestra alma gemela, nuestro amor que nos complemente, que nos complete, que nos llene, que nos......¿cuantas cosas queremos del amor?, ¿cuantas cosas pedimos del amor?, pero cuántas veces alguien nos amo y nosotros dijimos no, ahí hace su aparición Anteros (hermano de Eros) es el vengador del amor no correspondido, será por eso que después vagamos como parias en busca del amor.
Algunos dicen que el gran amor se vive una solo vez en la vida, que después sólo se vive un amor, también dicen que ese gran amor sólo se vive cuando somos adultos, en nuestra adolescencia solo vivimos un enamoramiento, pero ese gran amor sólo llega cuando crecimos, cuando somos adultos, ahora les pregunto ¿todos Ustedes vivieron su gran amor? y ¿que es el gran amor?, ¿existe el gran amor?; otros dicen que tuvieron más de un gran amor, ¿quien puede decir que es un gran amor o no?, ¿cuántos grandes amore se pueden vivir?.
Y vuelvo a ver las nuevas relaciones en el amor, para muchos el amor es el fin, para otros sólo un encuentro, para otros lo que el tiempo diga, cada uno de nosotros vemos, sentimos, pensamos, el amor de manera distinta, pero el amor no es el mismo para todos o como dije al principio, ya que Eros decide sobre el amor para que seguir penando por el todos los días de nuestros días y no esperamos a que Eros nos fleche con su pluma de oro, eso sí no se olviden, si dicen que no a ese amor, recuerden que Anteros, viene a vengar el amor.
*Las cartas y mitos a las que hago referencia en este ensayo sobre el amor, están transcriptas en la siguiente página:
Stella Maris Leone Geraci
Artista Plástica - Fotógrafa- Escritora
E-mail: stellamarisleonegeraci@gmail.com